18.5.18

Muchos hemos nacido solo para hacer del acto de vivir un ritual sagrado

EL ÉXITO EN LA VIDA
LA VIDA… la vida es un regalo, con sus encuentros, con sus desencuentros… llena de multitud de oportunidades e infinitos universos, de mensajes… de idas y venidas, de partidas y regresos, de acuerdos y desacuerdos… en definitiva llena de amor…

El lugar donde se puede y donde no se puede, donde quieres y no quieres… el regalo de tener la maravillosa experiencia de perderte y de encontrarte, de preguntar y de responder… de ser el alumno y el maestro… de nacer y de morir… y sobre todo de sentir.

El éxito en la vida, es relativo y muy variable donde intervienen numerosos factores, que no son fáciles de controlar así que durante muchos años creí que tener éxito en la vida era alcanzar logros. Logros profesionales, logros académicos, logros económicos, logros emocionales, logros, logros… de cualquier tipo.

Nos pasamos la vida persiguiendo la felicidad pero alimentando la creencia de que el éxito en la vida es llegar a alguna meta.

A lo largo de muchos años viví como otros muchos seres humanos en la creencia que el poder económico era lo único y más importante en esta vida,  NOS HABÍAN EDUCADO EN LA FRASE DE “TANTO TIENES, TANTO VALES”.

Hasta que en la madurez te vas dando cuenta que la falta de dinero era solamente una distracción externa para no afrontar el verdadero descubrimiento… el éxito en la vida no tiene nada que ver con estas creencias.

Cuando tomas conciencia y sientes la vida, se hace evidente que no se trata de lo qué tengas ni de cuanto tengas sino de lo que hagas con lo que tienes, el éxito no llega por alcanzar logros sino por VIVIR CON PLENITUD.

Y ¿QUÉ SIGNIFICA VIVIR CON PLENITUD?, pues estar presentes en cada momento. Que cada cosa que hagas en tu vida sea motivo de orgullo. Irse a dormir por las noches con la certeza que fuiste el mejor tú ese día, que diste lo mejor de ti en cada momento. 

Recuerda esa frase de sabiduría que dice: “NO HAY MEJOR ALMOHADA QUE LA CONCIENCIA TRANQUILA”.

Mucha gente compara su vida con las vidas de otros a los que consideran exitosos según sus creencias, y claro, casi siempre salen perdiendo. No todos hemos nacido para ser cantantes o actores o deportistas o reporteros famosos, etc… Muchos hemos nacido solo para hacer del acto de vivir un ritual sagrado.

Es sencillo, por ejemplo cuando acompañaba a mis hijos a sus clases extra escolares lo hacía gozando, pocos en este planeta tienen el privilegio de sentarse una hora en un banco del gimnasio a verlos saltar, y mientras lo hago, estoy honrando su existencia con la mía, los estoy haciendo felices y me pregunto: ¿HAY ALGO MÁS EXITOSO QUE HACER FELIZ A OTRO SER HUMANO? Yo creo sinceramente que no. 

Los medios de comunicación nos engañan, nos hacen creer que el éxito es tanto tienes, tanto vales, tanto sabes, tanto haces, tan bonita/o. Llaman éxito a una creación artificial de vidas clonadas, vacías y en numerosas ocasiones sin valores.

Ten siempre muy claro que el éxito no depende de nada externo a ti, sino de lo que hagas con lo que tienes.

La felicidad tal como nos la enseñan, es un estado vibratorio que vamos rellenando con capas y capas de creencias inventadas por una sociedad basada en el consumo, la enfermedad y lo finito.

Cuanto más vas limpiando tu “visión de la vida”, más cuenta te das que la felicidad siempre ha estado ahí. Que simplemente nos educaron a mirar hacia otro lado, tan solo se trata de mirar hacia el lugar adecuado, donde reside esa felicidad que no es otro que … nuestro corazón.



No hay comentarios:

Publicar un comentario